Despues del coronavirus
Es significativo el cómo el ataque de este virus, convertido en pandemia, nos ha obligado a parar. Nos hemos hecho dueños de nuestro tiempo, que anteriormente se regía por imperativos del trabajo u obligaciones cotidianas, aunque ha venido ligado este privilegio a lo más temido por la humanidad: la falta de libertad.
Tenemos que valorar, si no lo hacíamos hasta ahora, muchas cosas cotidianas pero sobre todo las humanas. Tendremos que darle la importancia absoluta y necesaria al tiempo que nos dedicamos a nosotros mismos y por ende el que le dedicamos a la gente que queremos, a los que nos importan, a los que les importamos.....en definitiva a vivir, si a vivir dignamente. La dignidad comprende muchos aspectos pero yo me referiré a los mas directos con la sociedad en la que moramos, el respeto, la bondad, la colaboración, el entendimiento ....si nos falta esto en nuestra relación social diaria fracasaremos . Salir de una crisis de este calado, sanitaria, económica y de identidad nos va a costar pero sería fantástico entender que será un momento ideal para intentar enderezar el como vivimos y así mitigar efectos en las próximas crisis, que las habrá.
Colaborar con nuestros vecinos acudiendo a sus consultas, negocios nos hará mas fuertes como sector dentro de la sociedad. Todos los sectores fuertes de una ciudad harán de nuestra ciudad un lugar mas fuerte, seguro y sobre todo fiable. La confianza es algo esencial en nuestros actos diarios, necesitamos saber que no nos van a fallar pero curiosamente cada vez nos alejamos más de nuestro entorno. La globalización nos ha llevado a confiar nuestro vivir diario a gente, empresas, negocios de los que no sabemos nada y nos hemos olvidado de los que si tienen calle y cara y eso nos pasará factura porque una de las principales claves de superar esta lacra será tener mucha CONFIANZA.
Salud
